Preocupaciones de belleza
Potenciar la luminosidad de la piel
¿Cómo se distingue una piel "perfecta"? Por su luminosidad y su textura regular. Pero a veces puede faltar luminosidad: la tez está apagada, opaca. Diversos factores pueden afectar la luminosidad de la tez: el tipo de piel (seca, o sujeta a imperfecciones y brillos), el estilo de vida, la falta de hidratación o de nutrición... Con buenos hábitos y una rutina adaptada, devuelve a tu piel toda su luminosidad y olvídate de la tez opaca.

Los gestos esenciales
Hacer deporte
Una buena oxigenación del organismo y las células propicia la luminosidad de la piel. Por eso es fundamental practicar una actividad física regular. ¡No hay nada mejor que un buen entrenamiento para lucir una tez radiante y unas mejillas sonrosadas!
Un estilo de vida equilibrado
La dieta influye en la calidad de la piel. El consumo excesivo de café o de otras bebidas energizantes, así como fumar o una dieta desequilibrada, pueden afectar a la luminosidad de la tez. Conviene reemplazar la cafeína por tisanas, beber un litro y medio de agua por día como mínimo, comer sano y evitar los excesos.
Revitalizar la piel
Al igual que los demás órganos, la piel se desintoxica de manera natural. Aprovecha los cambios de estación para adaptar tu rutina de tratamiento y tus hábitos a estas necesidades. En casa puedes adoptar el cepillado en seco, que tonifica, activa la circulación sanguínea y linfática, elimina las células muertas y mejora la calidad de la piel.
Limpiar la piel diariamente
Para lucir radiante, la piel debe estar bien limpia. ¡Aunque te vayas a la cama tarde, el desmaquillaje es imprescindible! Por la mañana y la noche, limpia tu piel en dos pasos con productos de tratamiento adaptados a sus necesidades: primero usa un desmaquillante y después un limpiador, para eliminar tanto los restos de maquillaje como los de polución, el exceso de sebo y las impurezas.
Los tratamientos potenciadores de la luminosidad

La rutina facial iluminadora
Los tratamientos expertos
Empieza tu rutina de tratamiento de la piel con una limpieza a fondo, por la mañana y la noche. Por la noche, puedes optar por la doble limpieza que no solo eliminará el maquillaje sino también las impurezas acumuladas en la superficie de la piel durante el día. Si la falta de luminosidad de tu piel se debe a las manchas, aplica un suero específico por la mañana y la noche. Una o dos veces por semana, aplica una mascarilla potenciadora de la luminosidad: ¡tendrás garantizada una tez luminosa!
Estos son los activos esenciales para devolver la luminosidad a la piel. Puedes encontrarlos en la rutina de abajo:
• EXTRACTO DE GINKGO BILOBA: protege la epidermis del estrés oxidativo que opaca la tez.
• EXTRACTO DE ROSA DE LOS ALPES: combate la falta de luminosidad de la tez.
• VID ROJA: favorece el brillo.
Encuentra la lista completa de ingredientes en la ficha de cada producto

La rutina para pieles con imperfecciones
Los tratamientos purificantes
Las pieles mixtas y grasas a menudo se enfrentan a una falta de luminosidad, relacionada con un exceso de sebo y la presencia de imperfecciones. Para limpiar y equilibrar la piel en profundidad y potenciar su luminosidad, realiza una exfoliación enzimática una o dos veces por semana, seguida de una mascarilla purificante. Como pueden ser sensibles, las pieles mixtas a grasas necesitan texturas adaptadas. Todos los días, utiliza cremas hidratantes y sueros ligeros para evitar "sobrecargar" la piel.
Encuentra la lista completa de ingredientes en la ficha de cada producto
• VITAMINA B3: favorece la uniformidad y la luminosidad de la tez.
• EXTRACTO DE BARDANA: purifica y equilibra
• LAVANDA (ACEITE ESENCIAL): purifica, alivia
Encuentra la lista completa de ingredientes en la ficha de cada producto

La rutina corporal
Los tratamientos corporales
En el cuerpo, una piel bien hidratada y nutrida es sinónimo de luminosidad. Para mantenerla, recuerda exfoliarla regularmente e hidratarla a diario. En verano, aporta luminosidad y bronceado simultáneamente con un autobronceador.
Estos son los activos esenciales para cuidar la piel de tu cuerpo y potenciar su luminosidad. Puedes encontrarlos en la rutina de abajo:
• EXTRACTO ACUOSO DE ROSA NEGRA: suaviza la textura de la piel para una piel más luminosa.
• EXTRACTO DE FLOR DE HIBISCO: exfolia y proporciona un bronceado radiante y uniforme.
• ACEITE DE CAMELINA: preserva el equilibrio lipídico y nutre, suaviza y calma la piel.
Encuentra la lista completa de ingredientes en la ficha de cada producto
¿Tienes alguna pregunta?
¿Cómo sé si mi piel carece de luminosidad?
Una piel luminosa refleja perfectamente la luz. Si la textura cutánea es irregular, o la piel está demasiado seca o deshidratada, la tez puede volverse apagada u opaca; y si es demasiado grasa, estará brillante (sobre todo en la zona T) y no luminosa.
¿Qué afecta a la luminosidad de la piel?
Diversos factores pueden afectar a la luminosidad de la piel. Pueden ser internos, como la edad, el tipo y estado de la piel, el estilo de vida, o externos, como la estación, el clima o la polución. La presencia de células muertas o manchas también puede afectar a su luminosidad o su uniformidad.
¿Cómo restaurar la luminosidad de la piel?
Empieza limpiando e hidratando la piel a diario con productos adaptados a sus necesidades. Puedes adoptar la doble limpieza para eliminar perfectamente el maquillaje y las impurezas de la piel por la noche. Exfolia la piel regularmente y protégela del sol y las agresiones externas.
¿Con qué frecuencia debo exfoliar?
Una o dos veces por semana.
¿Cómo exfoliar la piel sensible?
Utilizando preferentemente la exfoliación enzimática, más suave para la piel, en lugar de los exfoliantes mecánicos (con granos).
¿Cuál es la diferencia entre luminosidad y brillo?
La luminosidad es el signo de una piel equilibrada, que no carece de hidratación ni nutrición. El brillo está relacionado con el exceso de sebo. Su ubicación es diferente: el brillo se centra en la zona T, mientras que la luminosidad se sitúa más bien en los pómulos y las zonas con relieve del rostro.